El hombre hace suyo un lugar no sólo con el pico y la pala, sino también con lo que piensa al picar y palear. (sandor marai)
29/1/09
Desolación
Era hermoso, aquella penumbra silenciosa, buscó muy dentro del fondo de su memoria . La tierra húmeda, el olor a enebro calentado por el sol, el movimiento del aire; había grandes campanillas inclinadas que parecían fundidas en un metal violeta, y podía ver los colores de los claveles salvajes. El alma se vuelve despreocupada y recordar era como introducir un día feliz en una vida miserable. Ya no. abrió los ojos, todo era ocre,
Era un hecho.
Ni campanitas
Ni helechos
Ni ovejas, ni vacas,
ni vencejos
bajo el techo
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3 comentarios:
Precioso!
Gracias brilli, Cómo será sentirse en el alma de ese hombre? Espero no averiguarlo nunca. Es mi parte egoísta.
Un abrazo
Justo ahora releo Los Miserables. En un ser humano cabe toda la alegría, pero también todo el dolor. Terrorífica contradicción: lo grande y lo puta que puede llegar a ser la vida a veces...
Un beso Lys. Gran relato.
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